Jesús: En mis días malos te busco, en mis días buenos
te agradezco, en mis grandes días te alabo y todos mis días te necesito.
SEÑOR, cuando me sienta
confundido guíame, cuando me sienta débil, fortaléceme. Bendíceme con Tu
Espíritu. ¡GRACIAS POR ESTE DÍA.
Señor, antes que mis ojos
se cierren quiero juntar mis manos y decirte: Gracias por este día que me
diste. Amén.
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